Estudios exhaustivos han demostrado que la percepción acústica y el disfrute del sonido depende principalmente de 3 factores los cuales deben de ser analizados detenidamente en cada proyecto:

1. Un VOLUMEN ADECUADO, sin variaciones molestas, en puntos donde el sonido se pierda compitiendo contra el ruido de fondo y otros puntos donde se vuelve una molestia para los asistentes.
2. La CLARIDAD del sistema, en donde se comprenden adecuadamente las palabras, minimizando el esfuerzo cognitivo que hay que hacer para entender el mensaje, reduciendo la fatiga cerebral y maximizando el efecto de la comunicación.
3. La NATURALIDAD y amplitud de la respuesta sonora, lo que genera una experiencia auditiva inmersiva y lo mas fiel posible a la fuente original, y que este balance llegue a todos los puntos donde están los escuchas homogéneamente.

Y para cada uno de estos aspectos hay un estándar que lo evalúa y califica claramente.